Tomará tiempo la declaratoria de emergencia ambiental en Endhó
SITUACIÓN. El cuerpo de agua registra presencia de metales pesados como plomo y mercurio, así como arsénico, cianuro, nitratos, fósforo, manganeso, níquel, fosfatos, aceites y detergentes, entre otras sustancias químicas
SEMARNAT
Rosa Gabriela Porter Velázquez
Antes de la declaratoria de emergencia ambiental en la presa Endhó realizarán un diagnóstico en los próximos dos meses para reconocer las acciones y presupuesto necesario para solventar el problema en la región Tula-Tepeji, reiteró la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) a nivel federal, María Luisa Albores González.
El cuerpo de agua ubicado entre Tepetitlán y Tula de Allende recibe las aguas residuales del Valle de México, por lo que exhibe presencia de metales pesados como plomo y mercurio, así como arsénico, cianuro, nitratos, fósforo, manganeso, níquel, fosfatos, aceites y detergentes, entre otras sustancias químicas, de ahí que organizaciones como Movimiento Social por la Tierra (MST) exigen desde hace años la intervención de las autoridades gubernamentales.
Ante medios de comunicación, la funcionaria federal indicó que esta semana sostuvo reuniones con la citada agrupación para explicar que elaborarán un dictamen diagnóstico en los próximos dos meses, a partir de ahí revisarán las condiciones actuales de la presa Endhó, con muestras de suelo, aire, agua, flora y fauna y eventualmente declarar una emergencia ambiental en la zona afectada.
“Primero es el dictamen diagnóstico y luego la parte de la declaratoria de emergencia, esto coadyuva a que no sea una cuestión de presupuesto del sexenio, sino que sea algo visto y tenga un periodo conforme lo que tendría que llevarse la remediación ambiental, es algo que nosotros empezaríamos e impulsaríamos y pondríamos la base, pero no es una solución, de tantos años que se tiene esa contaminación hacer la remediación tal vez lleve diferentes periodos, justo con una declaratoria queda sustento para que exista presupuesto”. (sic)
En colaboración con el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), así como el Instituto Mexicano de Tecnologías del Agua, llevarán a cabo estudios de campo en las comunidades aledañas a la represa, para integrar un dictamen con los niveles de químicos, la magnitud de los daños, posibles soluciones a mediano y largo plazo, presupuesto que destinarán para subsanar, entre otras particularidades del impacto ambiental.