Leonardo Herrera

 Para los principales integrantes del gabinete de seguridad estatal, Tizayuca es el ejemplo morenista de fracaso en seguridad y gobierno, que tiene sumido en una crisis a este municipio, al que no tiene otra alternativa que rescatar, para evitar confrontaciones con estados vecinos y con el propio gobierno federal, que ve con preocupación cómo pudiera impactar en el aeropuerto “Felipe Ángeles”.

No lo dirán y tampoco reconocerán públicamente, los señalamientos que han hecho de incompetencia y falta de estrategia de la alcaldesa Susana Ángeles Quezada, en las mesas privadas donde se aborda la situación que enfrenta este lugar, sometido por grupos delictivos que extorsionan, ejecutan, cobran derecho de piso, roban y asaltan todos los días.

En tres años de administración, la primera mujer que llegó al poder en este lugar, no logra un plan contundente de combate a la inseguridad ni tampoco decisiones acertadas en la designación de jefes policiacos o solicitudes de colaboración, que eviten poner a este municipio en el mapa de los más inseguros en la entidad y todo por sus distracciones políticas que la han alejado de su deber principal.

Hace un año, cuando llegó el gobierno de Julio Menchaca, en sus primeras reuniones con el gabinete, Ángeles Quezada, responsabilizó a Mauricio Delmar ex secretario de seguridad y al entonces secretario de Gobierno Simón Vargas, de la falta de apoyo para combatir a las extorsiones y aseguró que se trataba de una revancha política.

Fue entonces que, el actual Secretario de Seguridad Salvador Cruz Neri, recomendó a la alcaldesa iniciar sustituciones en los principales mandos policiacos y modificar las estructuras operativas como en el caso del llamado C2, sin embargo, ninguna ejecutó y los resultados son evidentes, se agudizaron las extorsiones y los conflictos en las colonias y comunidades de este municipio que ha vivido un clima de intranquilidad, que generó zozobra entre los hombres de la iniciativa privada que al conocer la desatención de las sugerencias, entendieron que el municipio se había quedado a merced de los grupos delictivos.

El pretexto de acusar a las administraciones pasadas de todo lo que ocurre en Tizayuca, ya es desgastado y poco útil, cuando el mismo secretario de Gobierno Guillermo Olivares y de Seguridad Salvador Cruz, han confirmado que la alcaldesa ocupa la mayor parte de su tiempo en actividades proselististas y eso ya comienza a pasar factura con el propio gobierno federal, donde ya comenzaron a reportar el impacto negativo que podría tener la inseguridad en la proyección que se busca del aeropuerto Felipe Ángeles o en la consolidación de un corredor industrial con el Estado de México.

De mi tintero… Los obispos de las tres diócesis católicas en Hidalgo, han manifestado su preocupación por la falta de atención y hasta alejamiento que tienen de la Secretaría de Gobierno, además de las quejas en contra de Claudia Vieyra Alamilla, dicen tampoco han tenido acercamientos con el propio responsable de la política interna, Guillermo Olivares Reyna… Algunos exgobernadores buscan meterle ruido al proceso interno de definiciones de candidaturas y por lo pronto, Francisco Olvera comenzó a tratar de cabildear encuentros con expriistas con la bandera de Xóchitl Gálvez, será acaso su operador?

Twitter: @herreleo