Trabajar en un buen lugar, la base de una vida feliz

Sin duda sería un error vivir para trabajar, es decir, dar por hecho que el centro de la vida será estar resolviendo los problemas laborales y sentir que el estrés excesivo es parte normal de la cotidianidad. Sin embargo, entender el trabajo como “de lo que vivimos” en el sentido económico sería igualmente una manera muy limitada de entender lo que ocupa nuestro tiempo.


Para el contexto latinoamericano, lo que puede generar un cambio radical en cómo entendemos el trabajo es que este se convierta en un lugar que facilita la labor, que nos permite contribuir en una tarea y objetivo de manera ordenada y coordinada con el resto del personal. De allí que muchas empresas estén recurriendo a sistemas SAP o aplicaciones informáticas que permiten la organización de los recursos de un centro laboral, además de planear y dar seguimiento al uso de los recursos, sean humanos, financieros o materiales.


Xamai es partner de SAP en México y lleva 20 años asesorando en estos temas a empresas lo mismo de calado internacional que a pequeñas firmas que, igualmente, desean convertirse en un centro organizado, evitando que su personal se sienta permanentemente en una cruzada agobiante donde casi nada les ayuda a cumplir objetivos.


En efecto, vivir el empleo como un gran sacrificio indica que nuestro rendimiento no es lo que debería ser, aun cuando hayamos normalizado la situación. Asesorarse para lograr convertirse en un gran centro laboral es necesario y hay sistemas informáticos como SAP Business One México en donde además se encuentra la oportunidad de pactar asesorías en la elección de la plataforma más sencilla y útil para un lugar específico.
Debemos pensar en que firmas con presencia y prestigio e Latinoamérica han llegado a adoptar estos sistemas con gran éxito: DHL Express, 3M, AT&T, DIRECTV y Scotiabank, por nombrar algunos ejemplos, han logrado una penetración eficaz en países con condiciones divergentes como lo son Argentina, Bolivia, Brasil, Centro América y Caribe, Chile, Colombia, Ecuador, México, Paraguay, Perú y Uruguay. Lo que indica esto es que sus capacidades están orientadas correctamente y sí, en efecto, se han convertido en los mejores lugares para trabajar y sentirse satisfecho de ello.
Existe evidencia suficiente para hablar de estas empresas como parte del mejor grupo de lugares para trabajar. De hecho, todas ellas han certificado esta condición a partir de la experiencia real que han vivido sus colaboradores.
Esto requiere la implementación de una cultura organizacional y que esta sea detectable en todos los miembros de la organización. A la par, un centro certificado debe comprobar que hecha mano de procesos automatizados, digitalizados, que evitan que las labores manuales de administración constituyan un lastre para laborar.
Este binomio, automatización e implementación de cultura laboral, se definió a partir de investigaciones continuas, durante años, en los que se corroboró porqué los lugares de trabajo con culturas de alta confianza obtienen mayores rendimientos, logran innovar y, finalmente, satisfacer al cliente.
Como decíamos al inicio de este artículo, entender e trabajo como un mero recurso de subsistencia o como un martirio que se asume y al que se entrega el alma con tal de sobrevivir, es equivocado en un sentido vivencial, porque esto no conduce a la y tranquilidad personal ni a ser feliz, pero también es un factor para que una empresa no logre desarrollar todas sus potencialidades.
Ser un buen lugar para trabajar, finalmente, es ser una buena empresa.