Hasta ahora son nueve sedes en operación: dos en Pachuca, en Mineral de la Reforma, Actopan, Tizayuca, Tepeji del Río, Tulancingo, Huejutla y Tula de Allende

 REALIDAD

Rosa Gabriela Porter Velázquez

Aunque persisten las quejas porque son insuficientes los centros de verificación vehicular en la entidad, la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnath), Mónica Mixtega Trejo, reiteró que la población ahora tiene que adaptarse a una nueva forma de trabajo con los 12 macroverificentros ubicados en las regiones con mayor cantidad de automóviles, así como el sistema de citas.

Hasta ahora son nueve sedes en operación: dos en Pachuca, en Mineral de la Reforma, Actopan, Tizayuca, Tepeji del Río, Tulancingo, Huejutla y Tula de Allende; asimismo, tres más prevalecen en construcción, otra en la capital hidalguense, Tulancingo y la reciente cedida en Tepeapulco.

“Hay 12 concesiones, se les otorgan seis meses para que puedan construir las instalaciones, hoy son macroverificentros, anteriormente se tenían 54 pero algunos únicamente tenían una o dos líneas, hoy tienen más de cinco líneas, también tenemos la página de citas que ha funcionado bastante bien, necesariamente la ciudadanía tiene que adaptarse a una nueva forma de trabajo”.

Entrevistada por medios de comunicación, recordó que a finales de noviembre publicaron la invitación para proveedores mexicanos del sector privado interesadas en obtener dicho título administrativo por un periodo de cinco años, específicamente en Ixmiquilpan, Tepeapulco, Zimapán y Zacualtipán de Ángeles; sin embargo, solo cumplió un concesionario en Tepeapulco.

Agregó que con las últimas reformas a la normativa ahora los requisitos son más estrictos para otorgar estos permisos, por ello próximamente emitirán otra convocatoria para abarcar las regiones del estado.

“Son 600 mil (vehículos en el estado), es el padrón vehicular, hasta este momento han sido suficientes (los macroverificentros), precisamente estamos viendo el comportamiento de la ciudadanía respecto a la responsabilidad que tienen que cumplir y estamos viendo que ese número en este momento es suficiente”.

Entre las obligaciones de los interesados es que cuenten con mínimo mil 200 metros cuadrados de superficie y el número de líneas de verificación; máquinas actualizadas y calibradas; para garantizar la solvencia de las personas solicitantes y cumplimiento de disposiciones contenidas, de resultar procedente, otorgarán un millón de pesos por cada uno de los centros en que participe; informarán sobre la cantidad de personal calificado y certificado, que cuente con el equipo especializado y las condiciones mínimas de infraestructura y seguridad que instruye la normativa, etcétera.

Cuestionada sobre la situación de árboles infectados por plagas como el gusano descortezador y heno motita, aclaró que corresponde a los municipios la atención de esta problemática, aunque ya realizan un diagnóstico con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para reconocer zonas boscosas afectadas, mismo que durará hasta cuatro meses.