ELISEO GONZÁLEZ  Luce complicado que antes de entregar la estafeta, los presidentes municipales liquiden laudos, por despidos injustificados, pues “sino lo hicieron durante su administración, menos en un mes queda de gestión”

Alberto Quintana Codallos

Imposible que los presidentes municipales cumplan con el pago de laudos, por despidos injustificados, pues “sino lo hicieron durante su administración, menos en un mes queda de gestión”, indicó el dirigente de la Federación Auténtica de Sindicatos Municipales del Estado de Hidalgo (FASMEH), Eliseo González Hernández.

“Los actuales alcaldes no van acatar las recomendaciones de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del estado de Hidalgo (STPSH) para pagar los laudos pendientes”.

El líder sindical explicó que, por ejemplo, la presidenta municipal de Tizayuca, Susana Ángeles Quezada, despidió a más de 100 trabajadores del ayuntamiento desde el inicio de su administración y no quiere consolidar acuerdos.

Por este asunto ante el Tribunal de Arbitraje habrá de dejar una deuda a la próxima administración municipal por un monto de más de 100 millones de pesos.

González Hernández comentó que presentaron tres demandas contra las presidencias municipales de Tlahuelilpan, Mineral del Chico y Atotonilco del Grande por no acatar la Ley Federal del Trabajo (LFT) e incumplimiento de derechos laborales.

Contextualizó el líder de los burócratas municipales que las denuncias contra los alcaldes de estos ayuntamientos se iniciaron ante el Tribunal de Arbitraje, ya que se niegan acatar las recomendaciones de las autoridades federales y estatales.

Otro caso “es el del presidente municipal de Tlahuelilpan, quien se rehúsa a proporcionar el incremento salarial mínimo a los empleados y jubilados del ayuntamiento desde el principio de año, a pesar de que así lo establece la ley federal del trabajo”.

En este contexto están las presidencias municipales de Mineral del Chico y Atotonilco el Grande, donde se niegan a incrementar los salarios mínimos a los empleados sindicalizados.

Los alcaldes de Mineral del Chico y Tlaxcoapan tienen deudas pendientes de los laudos por despidos injustificados, salarios pendientes y derechos laborales del contrato colectivo del trabajo.