Alberto Quintana Codallos

La Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH) está completamente desarticulada, las condiciones en que fue entregada son catastróficas: se debe marcar un antes y un después de la reestructuración que se haga en la administración del gobernador Julio Menchaca, afirmó María Zorayda Robles Barrera.

En entrevista para La Crónica de Hoy en Hidalgo, la titular de la SSH comentó que los 120 millones por posibles desfalcos encontrados hasta el momento en la dependencia estatal, son una mínima parte de las anomalías encontradas.

Zorayda Robles manifestó que el equipo de salud trabaja desde el primer día de este gobierno, para que la población hidalguense tenga acceso a los diversos servicios médicos.

“El sistema de salud de Hidalgo estaba en el olvido desde hace varios años, fue saqueado, desarticulado y lo que menos ponderaba en las clínicas y hospitales era la atención a la población hidalguense”.

Destacó que operaban con la voluntad de los trabajadores de la dependencia estatal, pero sin insumos, infraestructuras que no les dieron mantenimiento muchas décadas. “En la Secretaría de Salud se aplicará una gran transformación con estructuras que se deben cambiar, ampliar, procesos de atención, abastos de medicamentos”.

En la visita a Tula se encontraron tres bodegas con más de 20 toneladas de medicamentos caducos e insumos, mientras en otros centros de salud y hospitales no tenían los productos y se puso en riesgo la salud.

Las visitas sorpresas a las unidades de salud son porque anteriormente se les avisaba de las inspecciones y cuando llegaban las autoridades, todo encontraban supuestamente en orden y maquillaban las atenciones.

La reestructuración en el sector salud comprende, prosiguió, atención en los procesos, materiales, medicamentos, creación de nuevos procesos en urgencias, se aplicará la estrategia denominada “Tiempo, Corazón y Vida” para abatir la mortandad por enfermedades cardiovasculares.

En enfocará una estrategia de la defensa de derechos humanos en el sector salud, un trato amable y que la población de las diversas comunidades del estado regrese a recibir sus consultas médicas a los hospitales y centros de salud.

Ejemplo de ello que en el Altiplano los habitantes no acudían a las consultas del sector salud porque eran caras las atenciones e inaccesibles por los malos manejos de quienes operaban los hospitales y clínicas del sector.