Marisol Ortega saldrá por la puerta de atrás

-La alcaldesa morenista y ligada al Grupo Universidad, a 5 días de dejar la alcaldía, enfrenta la peor crisis social, laboral y administrativa

TEPEAPULCO

Milton Cortés Gutiérrez

A tan sólo cinco días de que culmine la administración en el municipio de Tepeapulco, priva la tensión en contra de la alcaldesa Marisol Ortega López, luego que agremiados al Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Municipio de Tepeapulco incendiaron montones de basura en la explanada del ayuntamiento e interrumpieron servicios como abasto de agua potable y la recolección de basura.

Esto, al denunciar el incumplimiento de un incremento salarial previamente aprobado, el cual no se vería reflejado en su pago quincenal, que hasta la mañana de ayer tampoco se les había depositado.

La tensión en el lugar creció después que vaciaron el contenido de un camión compactador de desechos frente a la sede y del ayuntamiento sin ser atendidos por alguna autoridad municipal.

Los trabajadores señalaron que no darían tregua a la autoridad en un tema ya formalizado el cual, el municipio pretende llevar a las últimas instancias de la administración para no hacerlo efectivo, según señalan los trabajadores.

Negaron que la manifestación que se recrudeció en las horas recientes tenga tintes políticos, ya que en el grupo de inconformes solamente hicieron presencia trabajadores del municipio.

Criticaron que mientras los sindicalizados mantenían la incertidumbre por su petición no atendida, la alcaldesa Marisol Ortega, se despedía de su administración con un baile popular encabezado por el cantante de corridos Alfredo Ríos “El Comander”, el cual afirman, no tuvo el impacto esperado.

Vecinos del lugar reprobaron la postura del sindicato municipal, pero coincidieron en que en pleno ocaso del gobierno de Tepeapulco salen a la luz una cantidad importante de compromisos que no fueron cumplidos por las autoridades, así como diversas carencias en el lugar.

Concluyeron que a este problema se deben sumar las constantes manifestaciones por el desabasto de agua potable, lastre que también persigue a Marisol Ortega.